El director de Clubes Argentinos del Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación, Francisco Chibán, destacó durante la presentación “La importancia y el impacto de los clubes de barrio en el desarrollo de las comunidades a las que pertenecen, tanto antes de la pandemia como durante la situación actual. Algunas instituciones han articulado sus instalaciones como verdaderos centros de logística, de aislamiento o vacunación”. Además, explicó que “cada recomendación o sugerencia del protocolo tiene que ver con los recaudos y el esfuerzo necesario para seguir cuidando la vida y evitando la propagación del virus”.
La apertura de clubes estará sujeta a las jurisdicciones y a las fases en que se encuentre cada lugar. El protocolo tiene como objetivo orientar la reapertura de las instituciones deportivas barriales, el mismo será complementado con los procedimientos sanitarios que cada federación establezca.
Cada protocolo deberá ser presentado ante el Ministerio de Salud de la Nación y aprobado por dicho ente. Se debe tener en cuenta que cada actividad presenta escenarios e interacciones diferentes por lo cual cada actividad tendrá sus propias normas sanitarias y estructuras de procedimientos e interacción entre los actores (deportistas, entrenadores, preparadores físicos, fisioterapeutas, materiales deportivos, etc.).
Durante la vigencia del “distanciamiento social, preventivo y obligatorio” las personas deberán mantener entre ellas una distancia mínima de DOS (2) metros, utilizar tapabocas en espacios compartidos,
higienizarse asiduamente las manos, toser en el pliegue del codo, desinfectar las superficies, ventilar los ambientes y dar estricto cumplimiento a los protocolos de actividades y a las recomendaciones e instrucciones de las autoridades sanitarias provinciales y nacional. Evitar reuniones en espacios cerrados dentro y fuera de la institución, incluyendo reuniones de Comisión Directiva. Es mandatorio el uso de “barbijo casero, cubrebocas o tapabocas”, que no reemplaza las medidas de distanciamiento social ni la necesidad de mantener la distancia interpersonal de seguridad, pero puede considerarse como una medida adicional cuando transitoriamente no sea posible mantener la distancia de seguridad mínima.
Para mantener el distanciamiento social se debe limitar la densidad de ocupación de espacios (canchas, salas de reunión, buffet, vestuarios, espacios comunes, etcétera) a 1 persona cada 4 metros cuadrados de espacio circulable, para ello se puede utilizar la modalidad de reserva del espacio o de turnos prefijados. Debe señalizarse claramente la capacidad máxima de cada recinto y designar a una persona responsable de asegurar su cumplimiento. Cuando por sus características, esto no sea posible, se debe impedir el uso de estos espacios.
Se hace hincapié en el lavado de manos frecuente, en principio al llegar al club y luego durante el desarrollo de la actividad deportiva. Mantener, por supuesto, la recomendación de taparse la boca con el codo al estornudar o toser. Así recalca el comunicado: «Es responsabilidad de la institución proveer los elementos adecuados en cantidad suficiente y en forma accesible para la higiene personal (lavado de manos con jabón, solución hidroalcohólica y toallas de papel). Recordar que debe emplearse soluciones a base de alcohol únicamente cuando las manos se encuentran limpias, en caso contrario debe realizarse el lavado». También se recomienda la desinfección de las superficies como así también la limpieza previa con agua y detergente.
Se aconseja el uso de medios de transporte individuales (automóvil, bicicleta, entre otros). Se debe recordar mantenerlo ventilado para garantizar la higiene y la desinfección del interior del mismo.
Siempre que no esté prohibido, si fuere indispensable el uso del transporte público y exclusivamente para las actividades en las cuales se
encuentra autorizado, se recomienda seguir las disposiciones brindadas por el Ministerio de Salud.
El protocolo también destaca la importancia de identificar a los factores de riesgo para evitar que se expongan al virus y puedan trabajar desde su casa. Asimismo, alientan al teletrabajo como primera medida para las y los empleados de la institución y en caso de que no puedan prescindir de la presencialidad, se insiste en informar la aparición de los síntomas coincidentes con la enfermedad. Escalonar los horarios de asistencia de cada trabajador/a para garantizar la mínima convivencia simultánea de personas en un mismo espacio físico cerrado e impedir el ingreso de personas que tengan 37.5 o más de temperatura.
Otros puntos a destacar son: Debe señalizarse claramente la capacidad máxima de cada recinto y designar a una persona responsable de asegurar su cumplimiento. Planificar la agenda de actividades en forma articulada con todas las disciplinas que se practican en el club a fin de evitar aglomeraciones en las distintas áreas de las instalaciones. Informar sobre las medidas de seguridad e higiene preventivas y obligatorias requeridas antes, durante y después de la realización de las actividades y del uso de las instalaciones del club. Comunicar al público las políticas dispuestas en caso que las personas socias y/o concurrentes no cumplan las medidas de seguridad e higiene establecidas. Procurar que las actividades deportivas, culturales y/o sociales se realicen en espacios abiertos y/o amplios, respetando la distancia de seguridad.
Por último, y cuando la actividad requiera cambio de vestimenta, disponer de casilleros personales, bolsos o similares para el resguardo individual de la ropa, evitar compartirla y limpiarla y desinfectarla siempre que esté por usarse nuevamente.