El jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires participó de la edición 58° del Coloquio de IDEA 2022. En esta oportunidad, el escenario resultó ser un importante hotel de la ciudad de Mar del Plata. El foro reunió como siempre a los más importantes empresarios y dirigentes políticos y gremiales, de cara a la visión sobre el año 2023.                                                      

Horacio Rodríguez Larreta se dirigió a los presentes en el foro y sus expresiones se virilizaron por todos los medios de comunicación. Su contenido marcó una impronta de posicionamiento, en su rol de postulante a la candidatura para las próximas elecciones. En todos los temas a los que se refirió, lanzó un resumen de las que, seguramente serán parte de su plataforma eleccionaria. Demostrando la manera en que se está preparando para disputar el cargo de presidente. Está encendiendo el fuego para poner en la parrilla todo lo que hace falta.

Sus primeras palabras apuntaron a un llamado al consenso. Como siempre lo ha sostenido, según su entender, para lograr las transformaciones necesarias, hay que acordar con un 70% de los sectores. Con el poder de una elección ganada y con un escenario legislativo favorable- que se lograría con un triunfo más la actual paridad-es posible ampliar la cantidad de referentes que concuerden en un plan de estabilización para desarrollar al país.

Lo expresó con estas palabras: «Necesitamos construir un consenso amplio, que abra paso a una Argentina productiva y federal, que recupere la cultura del trabajo, que no le tenga miedo a la palabra mérito y donde la educación pública vuelva a ser un motor. Para eso se necesita una sola condición: que logremos ese acuerdo y terminemos con el péndulo infernal de la grieta». Fue un discurso donde se dedicó a manifestar las estrategias para un futuro gobierno, buscando el apoyo de los grandes referentes. El tema es como se podrán aplicar algunas medidas de flexibilización laboral o de reducción de costos del Estado. Como se las arreglará para convencer a los gremios y a los empresarios, de que es necesario ceder en algunas posiciones.

Por el momento se expresa con estos fundamentos: «Es importante que Argentina reconstruya el federalismo. Además, tenemos que tener una política mucho más agresiva de inserción en el mundo, porque hoy Argentina exporta solo el 16 por ciento del producto, teniendo riquezas naturales de todo tipo. El promedio del mundo es de un 30 por ciento y nosotros estamos en la mitad; esto demuestra lo cerrados que somos». En sus declaraciones siguientes, sugiere un trabajo en conjunto con el Gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, cuando dice: «Con el plan que tenemos con Gerardo Morales y nuestro equipo, es muy factible duplicar las exportaciones argentinas en seis años. Con la energía, con los alimentos, con el turismo y con la tecnología. Si logramos eso, se terminó el problema del tipo de cambio para siempre».

Por supuesto, es una prioridad absoluta el hecho de optimizar la explotación de loa ricos recursos que disponemos. Que es la manera de generar los dólares genuinos para el crecimiento del país y la creación de nuevos y mejores puestos de trabajo. En el medio de una coyuntura internacional como la que estamos viviendo, donde en el mundo, escasean, la mayoría de nuestra producción, tenemos la obligación de aprovechar la oportunidad que se nos presenta. No repetir viejos errores, cometidos en épocas con conflictos similares a los actuales.

Larreta continúa agregando puntas de lo que será su política en caso de alcanzar la presidencia: «Todo eso tiene que ir acompañado también de una profunda reforma micro que termine con las regulaciones de las actividades económicas. Todos ustedes tienen la pata del Estado arriba de la cabeza con un montón de burocracia. Son unos héroes si siguen produciendo en la Argentina en esas condiciones. Tenemos que sentarnos desde la política con cada sector para ir destrabando todos esos controles, lo que le daría un gran salto de competitividad a nuestra economía».

Un desafío para titanes, pero sobre todas las cosas, para dirigentes inteligentes y honestos, que se decidan por tomar el camino de lo sustentable. De modificar las estructuras que nos han llevado a ser uno de los países más atrasados del planeta. Todo lo aplicado hasta ahora, desde hace décadas, resultó un fracaso absoluto. Los modelos empleados, se cayeron de manera estrepitosa. Seriamos necios si continuamos con las mismas recetas. Tampoco se trata de inventar nada. Simplemente repetir lo que hicieron aquellos países a los que les va bien. Como debe ser, porque no hay razón para que una Nación no pueda administrase correctamente.

Salvo la ineptitud de los funcionarios. Respecto a la legislación laboral y el debate que se viene para buscar la reformulación de los planes sociales, cambiándolos por trabajo formal, para que no se conviertan en: «desincentivos para la generación de empleo». Se refirió con estos conceptos al impulso de un mercado laboral con amplia apertura de fuentes de trabajo, sumándose a:«Un mundo que crea trabajo desde la tecnología, desde el conocimiento y desde las cadenas de valor globales».