Suele suceder que, dentro de los grupos de riesgo, muchas veces las cifras son superiores, en algunos segmentos donde la población general es más numerosa. Por ejemplo, en la Ciudad, la población de adultos mayores es más alta que en la provincia de Buenos Aires. En la general, que es como se define la cantidad de vacunas a entregar, los habitantes superan por mucho a los de Capital. Entonces reciben más vacunas para aplicar a una población de riesgo más reducida. Sobre esa decisión de distribución, definida por el ejecutivo, así lo comenta el ministro Quirós: “Ha tomado una decisión de distribución de vacunas basada en la población general, cuando la vacuna se aplica a grupos de riesgo y, lamentablemente, los grupos de riesgo no son proporcionados a la población general en todas las jurisdiscciones». Por el momento, el Gobierno Nacional informó que en estos días se destinarán más dosis a la Ciudad para los adultos mayores de 80 años. Cuando termine de inocularse esa etapa etaria, se pasará a convocar a los mayores de 70 años. Se había suscitado una polémica entre Nación y Ciudad, cuando el Ejecutivo anunció que la vacuna china de Sinopharm estaría destinada a aplicarse al personal educativo. La razón esgrimida era que no se podía utilizar para los adultos mayores de 60. Porque parece ser que, no tiene publicados los ensayos correspondientes a ese grupo de personas. Entonces, como los docentes no pertenecen a ese segmento, podrían recibirla sin problemas. Quirós, parece haberse dado cuenta de la situación y estaría reuniéndose con los funcionarios del ministerio de Educación de la Nación para consensuar la manera de iniciar la inmunización de los docentes. Que ya estaría en marcha. Fueron otorgados 40 mil turnos para la inoculación de la vacuna Covishield (de Oxford-Astrazeneca). Se empadronaron otros 75 mil que se encuentran en la lista de espera a la llegada de las dosis. Los mayores de 70, seguirían en el orden correlativo de las etapas. Dependiendo el inicio de la inscripción para solicitar los turnos, de la disponibilidad de la vacuna. También fueron vacunados los adultos
mayores de 80 que están internados en los geriátricos. Otra situación que generó polémicas, fue la distribución de dosis, que realizó el gobierno de la Ciudad, para algunas obras sociales y prepagas. Estas, están destinadas para aplicarlas a los mayores de 80 que estaban afiliados a esos lugares. Estos podían elegir hacerlo allí e inscribirse para ser inoculados en esas instituciones donde se atienden de manera habitual. Según las autoridades de la Salud de la Ciudad, todo el proceso está perfectamente monitoreado. No se les dan las vacunas a otras personas que no reúnan la condición de ser mayores de 80. Si se anotan 4 las dan 4 vacunas y deberán justificarlos con los informes pertinentes. En la Ciudad repiten insistentemente, que todas las campañas de vacunación, por cualquier enfermedad, se realiza con ese mismo diseño, desde hace muchos años. Se espera que la justicia se expida y lo resuelva como corresponde. El fin de semana pasado, llegaron 1.200.000 dosis de la rusa Sputnik V. Según el cálculo que emplea la Nación, a la Ciudad le tocarían 84 mil dosis. Con la cuales terminaría de vacunar a los adultos mayores de 80. Por esa razón se confía en pasar a la siguiente etapa con los mayores de 70 que se compone de una población de 250 mil personas en la Ciudad de Buenos Aires. Los que deberán inscribirse solicitando el correspondiente turno. Por otro lado, con lo equipos disponibles para ese fin, se concurrirá a vacunar a los mayores de 70 en los geriátricos que estén internados. La tercera etapa está compuesta por 275 mil personas mayores de 60 años. En la medida que se vayan cumpliendo cada una de las etapas, se pasará a la siguiente. Inmediatamente después de los mayores de 60 años, siguen con la etapa 4: que comprende al personal de las Fuerzas Armadas, de Seguridad y del servicio penitenciario. Luego, la etapa 5: personas entre 18 y 59 años con factores de riesgo. La siguiente, etapa 6: personal docente y no docente de los niveles educativos inicial (jardín), primaria y secundaria. Al final, la etapa 7: otras poblaciones estratégicas que definan las jurisdicciones. Al final de este plan de vacunación, se habrá logrado vacunar a la cantidad de 1.200.000 personas que componen el grupo de mayor riesgo frente a los contagios de la COVID-19. Es la idea de Fernán Quirós y su equipo de salud de terminar con este plan antes de que pueda ocurrir la posible llegada de la segunda ola de contagios. Consideran que, de esta forma, los efectos letales que se podrían producir, se atenuarán de manera considerable. El ministro asegura que, si disponen de la cantidad de vacunas suficiente, tienen la cobertura logística para aplicarlas en tiempo y forma: «Tenemos la capacidad instalada de vacunarlos en dos meses, a razón de 25.000 por día».