En el día 34 de la invasión rusa a Ucrania, se abre una ventana que posibilite el fin de los enfrentamientos: Estambul, en Turquía es la sede del diálogo, donde ya la dictadura de Vladimir Putin anunció una relajación del cerco militar sobre Kyev como medida de confianza, por el progreso «sustancial» en el diálogo entre ambas delegaciones.

El asedio sobre Chernígov, también en el norte de Ucrania, se verá igualmente aliviado. La «reducción drástica de la actividad militar» en dichos frentes ha sido comunicada por el viceministro de Defensa ruso, Alexander Fomin. Confirma la concentración de esfuerzos en la región de Donbass, observada desde hace días, que ha permitido algunos contraataques ucranianos en localidades como Irpin.

Los representantes rusos y ucranianos se han visto las caras esta mañana en Estambul por primera vez. En casi tres semanas. Al margen de las discusiones por videoconferencia. Y los avances parecen haber sido espectaculares, hasta el punto de que las delegaciones se han visto obligadas, a tomar el camino de regreso a sus capitales, para dar cuenta de ellos. Inicialmente estaba previsto, que el diálogo se extendiera hasta el miércoles.

Formin se mostró optimista al considerar que están avanzando las negociaciones sobre «la neutralidad y el estatus no nuclear«. Además de la concesión a Ucrania de «garantías de seguridad». Y hace un llamamiento para que «en Kiev se tomen las correspondientes decisiones y se creen las condiciones«, para seguir adelante con las negociaciones.

Garantías de seguridad y entrada a la UE

David Arajamia, uno de los negociadores del presidente Volodimir Zelenski,  ha asegurado a que este punto de las negociaciones está muy cercano al acuerdo. «Garantías de seguridad y el estatus neutral y no nuclear de nuestro estado. Estamos dispuestos a aceptar esto. Este es el punto más importante», dijo el presidente ucraniano este fin de semana a los medios rusos.

Lo que Kiev desea es que dentro de cinco años Rusia no vuelva a hacer lo mismo con alguna otra excusa. Estas garantías de seguridad deberían incluir también respetar las intenciones de Ucrania de unirse a la Unión Europea. Moscú, en principio, parece dispuesto a ceder en este punto, siempre que Ucrania mantenga su neutralidad militar y no albergue bases militares extranjeras en su territorio.

Según han apuntado cuatro fuentes cercanas a la negociación, al Financial Times. Pero el jefe de la delegación rusa, Vladimir Medinsky, no lo ha dado por hecho, aunque sí ha reconocido que se trata de una petición de Ucrania.

Persisten los combates en el Este

Coincidiendo con las negociaciones de Estambul, Kiev destacó que, en el Donbass, especialmente en la región de Donetsk, los rusos habían intensificado tanto los disparos con armamento pesado como las acciones de asalto.

«Se ha reducido notablemente el potencial militar de las Fuerzas Armadas de Ucrania, lo que nos permitirá centrar nuestra atención y nuestros mayores esfuerzos en lograr el principal objetivo, la liberación del Donbass«, reiteró hoy el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú.

Además de que, «en general, las principales misiones de la primera etapa se han cumplido», Shoigú destacó la destrucción casi total tanto de la defensa antiaérea como de la aviación ucranianas. El objetivo del Ejército ruso es el triángulo formado por Kramatorsk, la principal base militar ucraniana en el Donbás; Avdeyevka, situada cerca de la primera línea del frente en Donetsk, y Severodonetsk, en la región de Lugansk.

La administración militar de Lugansk informó hoy, que Severodonetsk se ha quedado sin suministro eléctrico debido a los ataques rusos. Precisamente, la mayor resistencia al avance ruso se centra en Donetsk, donde las fuerzas rusas han logrado tímidos progresos y únicamente controlan la mitad del territorio