El Board del FMI, confirmó, ayer, viernes 25 de marzo la aprobación del acuerdo con nuestro país. Se trata del cierre de la negociación entre el organismo y nuestro gobierno por el acuerdo de las “Facilidades Extendidas”.
Calificaron al entendimiento como un programa: “pragmático y realista que busca dar estabilidad macroeconómica». Este comunicado surgió después de la entrevista virtual que sostuvo el presidente Alberto Fernández con la titular del FMI, Kristalina Georgieva. Con la decisión tomada, se acompaña el anuncio de un primer desembolso inmediato que se aplicarán a reforzar las reservas.
El texto del comunicado transmitido por el organismo internacional, manifiesta: «El Directoio Ejecutivo del FMI aprobó un nuevo acuerdo de 30 meses en el marco del Servicio del Fondo Ampliado para Argentina por un monto de 31.914 millones de DEG (equivalente a 45 000 millones de dólares, o el 1000 por ciento de la cuota). La decisión de la Junta Ejecutiva permite a las autoridades un desembolso inmediato de 7.000 millones de DEG, lo que equivale a 9.650 millones de dólares».
Con ese desembolso, Argentina destina US$2700 millones para afrontar el vencimiento que tenía por la deuda. el resto se destina a aumentar las reservas del Banco Central. El acuerdo de facilidades extendidas tiene un período de gracia de cuatro años y medio. Por lo tanto, los primeros pagos comenzarán en el año 2026 y concluirán en 2034. La aceptación del organismo de los términos del acuerdo, se cerró gracias al apoyo brindado al final, por los gobiernos de EE.UU. y Brasil, quienes dudaban de apoyar al Directorio con este acuerdo.
La Directora del FMI, Kristalina Georgieva, realizó las siguientes declaraciones, teniendo claro que a pesar de que se está avanzando en una: “recuperación económica y del empleo, la Argentina continúa enfrentando desafíos económicos y sociales excepcionales. El ingreso per cápita deprimido, niveles elevados de pobreza, inflación alta persistente, una pesada carga de deuda y bajos amortiguadores externos”.
Por eso recomienda trabajar en ese sentido, buscando la unidad frente a la responsabilidad de cumplir con las metas comprometidas. Insiste en que para transitar por ese camino: “Un fuerte consenso político y social es clave para sostener la implementación de la agenda de reformas, incluso a mediano plazo, lo cual es esencial para abordar las vulnerabilidades de larga data del país”. Para obtener buenos resultados, es necesario responder a los compromisos contraídos para cumplir con los mismos.
Una tarea que es muy difícil en las actuales condiciones de la economía. Pero no imposible, si por delante hay un objetivo tan importante como estabilizar nuestra debilitada macroeconomía. Mientras, la Directora sostiene transmitiendo como sigue el rumbo: “Los riesgos para el programa son excepcionalmente altos y los efectos secundarios de la guerra en Ucrania ya se están materializando. En este contexto, la recalibración temprana del programa, incluida la identificación y adopción de medidas apropiadas, será fundamental para lograr los objetivos”.
