El Gobierno Nacional espera que el acuerdo con el fondo se cristalice en los próximos días. Llega a esta conclusión después de la reunión del directorio del FMI en Washington, del miércoles 16 de febrero. Aspiran a que se termine de concretar los detalles del entendimiento. La idea es presentarlo en el Congreso, algunos días después de la apertura de sesiones.

Fuentes del gobierno estiman que es posible que una vez que resulte armado ese acuerdo y presentado en el Congreso, es muy posible que se logre el apoyo de mayoría. A pesar de los conflictos que origina esa resolución por el desacuerdo de Máximo Kirchner con la decisión de negociar con el FMI. Está claro, que algunos de los legisladores del grupo de Máximo, posiblemente no lo aprueben. Igualmente estiman que podría ser apoyado, también por la oposición. Quienes no tienen una posición clara tomada, todavía. Basada en desconocer los alcances del entendimiento. Porque aún no los conocen.

Sí, están de acuerdo en evitar el default. Las dudas surgen en la manera en que se podrá cumplir con las metas previstas para equilibrar el déficit, la inflación, las reservas, la emisión monetaria y el valor del dólar. Sostienen que, para alcanzar los niveles de disminución de esas variables, se necesita de un manejo de la economía muy austera. El temor es que, en lugar de bajar los gastos para lograr el equilibrio, se opte por aumentar la recaudación tributaria. También es complicado el aumento de las tarifas. Eso se verá cuando se presente el documento negociado entre el fondo y el Gobierno. En las dos cámaras, no habrá lugar para debatir y cuestionar ninguno de los artículos. Solamente pueden realizar una breve opinión sobre ellos.

La definición es por sí o por no. El Ministro de Economía Martín Guzmán, se manifestó sobre el particular, en sus declaraciones a la agencia Télam: «La idea de que va a haber documentos secretos es un sinsentido. Una vez concretado el acuerdo a nivel staff del FMI, se enviará al Congreso de la Nación un proyecto de ley que en sus anexos contendrá todos los documentos que sean la base de ese acuerdo, con cada uno de sus detalles».

En línea con las declaraciones de José Mayans, jefe de bloque del Frente de Todos en el Senado, por medio de las cuales puso en dudas la posibilidad del respaldo kirchnerista al acuerdo, en la Cámara Alta. Por tal razón, el Gobierno decidió que su tratamiento entre por Diputados. Con la idea que, en la Cámara Baja, tendrán menos problemas para aprobarlo.

Desde el Fondo Monetario Internacional, Gerry Rice, su vocero, realizó declaraciones afirmando que el objetivo del organismo es lograr un acuerdo definitivo, cuanto antes. Asumiendo en que se han convenido entendimientos previos sobre los subsidios a la energía y el financiamiento externo. Así lo dice en estas palabras: «Las negociaciones continúan, estamos trabajando de manera muy cercana con los funcionarios del gobierno argentino para alcanzar un acuerdo de nivel de staff. Hubo un entendimiento en reducir subsidios a la energía y movilizar el financiamiento externo para mejorar la resiliencia argentina. No hay en agenda una misión presencial en Buenos Aires o en Washington, aunque aspiramos a lograr un acuerdo técnico lo más rápido posible».

También sostiene que los Estados Unidos, han avalado los puntos básicos del programa que presentó Argentina. Con el compromiso de lograr la refinanciación de los pagos de la deuda.